02 de Septiembre de 2010 | Tandil
En Escuela Técnica N·1 de Villa Alduncín
Charla con la escritora Patricia Ratto

El miércoles pasado, a las 20 y 20, Patricia Ratto dialógó con los alumnos y profesores del turno noche de la Escuela Técnica N· 1 de Villa Alduncín.

En un clima de interés, curiosidad, respeto y mucha participación, Ratto leyó fragmentos de su novela "Nudos" y respondió a las variadas preguntas y comentarios de los participantes del encuentro, que merodearon temas como: la escritura de ficciones, la selección de personajes y lugares, la vinculación de sus obras con la historia reciente de la argentina, el uso del lenguaje que hacen los personajes, "Pequeños hombres blancos" -anterior novela de Ratto-, y algunos adelantos del texto en el que la escritora tandilense trabaja en estos momentos.

Todo comenzó por la iniciativa de la profesora de letras Valeria Sallustia, quien puso en marcha un proyecto de lectura que persigue que los alumnos se acerquen a la literatura y lean libros de una serie de textos entre los que pueden elegir. Luego cada alumno expone brevemente de qué se trata lo que leyó y recomienda el libro a sus compañeros.

En el marco de este proyecto, María Rosa Souto, alumna del establecimiento, decidió leer "Nudos", y luego "Pequeños hombres blancos" . Eso la llevó a ponerse en contacto con Patricia Ratto, y a gestionar su presentación en la escuela, todo lo cual culminó finalmente en la invitación a conversar con todos los alumnos.

"Una muy buena experiencia" dijo Patricia Ratto. "Fue un gusto para mí conocer a mi querida nueva lectora María Rosa, conversar con alumnos y profesores y comprobar que cuando un profesor realiza proyectos interesantes para generar el interés por la lectura, pone libros a disposición de los alumnos, recomienda autores que personalmente le han interesado y hasta les lee en vos alta a sus alumnos, el encuentro con los libros finalmente se produce, y muy bien".

La charla, en la que circuló el cafecito y el mate, tuvo sus momentos emotivos y hasta graciosos. Terminó con un aplauso, fotos y la entrega de un ramo de flores.